Es el yacimiento arqueológico más importante de la Villa de Moya, formado por un numeroso conjunto de cuevas naturales en las que habitaron los aborígenes canarios. Situadas en una montaña de 433 metros de altitud, se usaban fundamentalmente como lugares de habitación y para el almacenamiento de cereales. La presencia de cazoletas y canalillos en algunas de las cavidades ha llevado a interpretarlas como lugares vinculados a prácticas religiosas. Gracias al C14 sabemos que la Montañeta estaba habitada al menos hace 1200 años.